VINTAGE TROUBLE: Double Trouble: Estilo y Sentimiento (Escenario Santander, 13 de Enero 2018)

Estuvimos en la última cita de los chicos de Vintage Trouble en Escenario Santander dentro de su mini gira española de invierno, disfrutamos como locos, pudimos charlar con ellos al finalizar el show (y tomarnos alguna que otra cerveza juntos) y os lo detallamos con todo lujo de detalles. Como siempre.


Publicado originalmente en LA FACTORIA DEL RITMO

Texto: Víctor M Bustamante 
Fotos: Luis del Rosal Pêrnía aka Mr. Deck

De su primer disco “The Bomb Shelter Sessions” (2011) pudimos oír en directo los temas “Blues hand me down”, “Not alright with me” y “Jezzebella”. De su EP “The Swing House Acoustic Sessions” (2014) nos regalaron “Another´s man words” y de su último trabajo publicado hasta la fecha, “1 Hopeful Road” (2015), su energético “Run like a river”, “Doin´ what you were doin’” y “Strike your light”, tema que abrió el show y que en su versión álbum colabora Kamilah Marshall. Entre medias temas nuevos, potentes instrumentales para lucimiento de la banda y versiones de temas clásicos.
La sala colgaba el letrero de “sold out” desde hacía tiempo y allí pusimos comprobar que se había desplazado gente de otras provincias al reclamo de una banda que promete más que música en directo, un show completo y un vocalista en plena forma física que no descansó ni un momento en la hora y media larga de show y al que pudimos ver saltar, doblarse, jugar a la comba con el cable del micro, saltar al público, subirse hasta el primer piso y cantar desde arriba a un público que enfervorizado le hacía los coros desde abajo, trepar a la mesa de sonido y caer en plancha sobre los brazos de sus fans… en definitiva, un delirio cuasi circense que no defraudó en absoluto a aquellos que esperaban ver más que un concierto al uso.
También hubo tiempo de baladas desgarradas para lucimiento de un Ty Taylor en estado de gracia y solos instrumentales para regocijo de los que amamos el soul y el rock en estado puro.
Tras el concierto, y empalmando su último tema (“Not alright by me”) con bajada a pista y baño de masas incluido, se dirigió al stand de merchandising donde, tanto él como su banda al completo, firmaron uno a uno los cientos de discos, camisetas y memorabilia que les quitaban de las manos literalmente y se hicieron fotos y charlaron con todos sus fans. Es una actitud que muy pocas bandas tienen a bien hacer y que se agradece muy gratamente.
Una vez firmado el último disco (el público agotó todas las existencias en pocos minutos) pudimos hablar con ellos en backstage y nos hablaron de sus planes de futuro.
Al preguntarles sobre si estaban preparando material nuevo (su último trabajo ya tiene 3 años de edad) nos respondieron que así era y que además será un trabajo muy especial grabado en directo recogiendo temas que de todo este tiempo que han estado girando en salas y festivales por todo el mundo. Ahora mismo están en la fase de descarte y elección del repertorio pero prometen no hacernos esperar mucho hasta su salida al mercado.
En cuanto a próximas visitas a nuestro país aún no hay nada cerrado para este año pero no descartan volver a estar en algún festival este verano, tal como en el BBK Live de hace un par de temporadas. Precisamente guardaban un muy buen recuerdo de ese momento y de la ciudad de Bilbao de la que reconocieron estar “enamorados” y de su “Guggenheim”, el cual les dejó impresionados. Igual es momento de repetir visita aprovechando que aún no está cerrado el cartel de esta edición….
Tuvieron además el detalle de dejarnos un mensaje para los oyentes de nuestra versión radio de “La Factoría del Ritmo” en Arco FM y que podréis escuchar en breve. En un guiño a nuestro programa nos pidieron que si en un futuro se convierten en artistas mainstream, por favor, no dejemos de pinchar su música. Y así se lo prometimos. La buena música es válida venda o no venda. Siempre.

Lo mejor: 

  • No defraudaron a aquellos que venían a ver un show diferente y a disfrutar de las piruetas de un vocalista no muy al uso. La forma física y el fondo que tiene Ty son para quitarse el sombrero.

 Lo peor: 

  • Quizás un uso un poco abusivo de los teclados que para mi gusto (y especialmente el de Mr. Deck que no se perdió la cita) le restan protagonismo a otros instrumentos y que en sus inicios muy sabiamente no incluían. 
  • También se echó en falta más sección de viento (su vocalista sacó un trombón a mitad de la actuación y lamentamos que no lo usara en más temas).

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