El día de Santiago, fiesta oficial en la capital cántabra, fue el escogido para uno de los eventos más importantes e históricos que se recordarán durante mucho tiempo, un grupo de leyenda, en una gira impresionante en cuanto a calidad y nostalgia.
Texto: Víctor M Bustamante / J M Hoyos
Eso me pasó a mí el pasado 25 de julio, día de Santiago el Mayor, y Mayor no podía ser el regalo. Estar a un metro de distancia de Tito, Jackie, Marlon y Jermanie era un sueño hecho realidad y nunca agradeceré lo suficiente a los organizadores de tan histórico evento, primero por apostar por ellos, y segundo por permitirme disfrutarlo desde las distancias cortas. La sombra de Michael es alargada, muy alargada, pero hay que reconocer la labor del resto de sus hermanos como se merecen.
Dejando de un lado a La Toya y a Rebbie, su otra hermana, Janet, ha tenido una carrera irregular pero llena de buenos momentos. Su disco "Nasty" y en especial el siguiente "1814 Rhythm Nation" son magníficos ejemplos de lo mejor de la música negra de los años ochenta. Sus producciones con Jimmy Jam y Terry Lewis la encumbraron al Olimpo del pop y pocas veces ha bajado de ahí, a pesar de no contar con el apoyo del gran público en sus últimos trabajos.
Jermanie en España ha tenido una trayectoria más discreta pero sus discos "Precious moments" (1986) y "Dynamite!" (1984) deberían de ser revisados sin lugar a dudas. Cierto es que en su currículum hay momentos menos, digamos, "dignos" como ese "When the rain begins to fall" (1984) mano a mano con la diva Pia Zadora, número 1 en medio mundo, y que posiblemente sea de sus temas más recordados, pero también momentos gloriosos como su "Let´s get serious" (1980), "Do what you do", "Sweetest Sweetest", "Dynamite!, "Tell me I´m not dreamin´ (too good to be true)" (versionada más tarde por el siempre añorado Robert Palmer en su obra cumbre "Heavy Nova"), su dueto con Whitney Houston "Take good care of my heart" o su versión paralela del "Thriller" de su hermano Michael "Escape from the Planet of the Ant Men" (todos ellos incluidos en su largo de 1984 "Dynamite!"). En cuanto a los Jacksons en conjunto, desde sus comienzos, apadrinados por una jovencísima Diana Ross, han firmado trabajos plenos de calidad y repletos de temas para la historia. En Santander tuvimos ocasión de disfrutar de un buen puñado de ellos, desde sus primerizos "ABC", "I want you back", "I´ll be there", "Never can say goodbye" o "The love you share" a sus himnos disco como "Can you feel it", "Blame it on the boogie", "Shake your body (down to the ground") o "Dancing Machine" o a temas de la década de los 80 como "This place hotel" o "State of shock", grabado en su momento con la complicidad de nada menos que Mick Jagger.
También hubo ocasión para el lucimiento de uno de los miembros menos conocido en solitario por estas tierras, Tito, que presentó su reciente single "We made it" y para el recuerdo del gran Jacko en forma de algunos de sus mejores temas. En esta ocasión versionaron un muy emotivo "Gone too soon", acompañado de imágenes de toda su trayectoria en recuerdo de Michael, "Rock with you" y "Wanna be startin´ something".
En mitad del show pudimos ver un largo vídeo con entrevistas a sus progenitores entre otros (su padre acababa de fallecer hacía tres escasas semanas y comprobamos como estas imágenes les removían por dentro y dejaban aflorar sus sentimientos) y un extenso dossier de toda su carrera y logros desde sus comienzos hasta la actualidad.
Una hora y media de show, calculado, medido y musicalmente perfecto, como si estuviéramos presenciando un espectáculo revival al más puro estilo casino de Las Vegas, que nos dejó con ganas de mucho más pero eternamente agradecidos por haber podido cantar, bailar y, en definitiva, vivir con un trozo de la historia musical de todos los tiempos.
Lo mejor:
- ¿Qué hay mejor que ver a los Jacksons cantando sus grandes éxitos?
Lo peor:
- El video resumen se hizo tedioso al no disponer de subtítulos lo que hizo que la gente aprovechara para ir corriendo a las barras a reponer fuerzas.
- La poca afluencia de público para la magnitud de cita que era.