Vicky Sánchez (Torrelavega, Cantabria) es conocida en el mundo artístico como Gastelo.

De formación clásica, su primer concierto de piano fue a la edad de 11 años, siendo en el conservatorio donde empieza a sentir la necesidad de poner letra a la obra de clásicos como Chopin.
En 1997 entró a formar parte de una banda en el instituto a la vez que se presenta a un concurso de maquetas con sus propias canciones, ganando el concurso las ediciones de 1998 y 1999, año en que comienza a tocar por locales de música de Cantabria, defendiendo sus canciones, guitarra en mano. Una de esas maquetas llega a la compañía Sony Music quien decide fichar a Vicky y publicar su primer disco.
De este modo, en 2002 la multinacional Sony Music publica su opera prima "En la luna", bajo el nombre de Victoria Gastelo; una personalísima colección de canciones distintivas producidas por el prestigioso saxofonista Arturo Soriano. Vicky es nominada como artista revelación en los Premios Amigo. Desde entonces, la cantante cántabra, además de componer para artistas como Marta Sánchez, Malú, Mónica Molina o Pastora Soler, ha publicado cuatro discos, que han solidificado su estilo de referencias pop y el perfume de los songwritters americanos.

"Ahórrate las flores" (2007) es su segundo trabajo, primero con Gastelo, cuyo single "Como el sol" conquista el Premio del Jurado al Mejor Videoclip en el Festival de Realizadores de Videoclips, así como una mención especial en el Festival de Jóvenes Realizadores de Zaragoza, siendo recomendado por los canales como MTV España y Sol Música, y proyectándose en el Festival de cine de Málaga.

Continúa su discografía con "En el fondo de los mares" (2010), de influjos country y folk americano, "Con el viento en la cara" (2014), grabado en los estudios de Fernando Macaya, David Escudero y Bori Alarcón, y "Lo he vuelto a hacer" (2018), editado por El Dorado, en el que colaboran artistas como Carlos Goñi o Andrés Suárez.
A la pregunta de ¿Cómo nace el single “Mami dice qué”?, Vicky contesta: "Jugaba con unas notas en el piano cuando llegó la canción. Mi viejo piano fue comprado con los ahorros que mi madre fue juntando poco a poco, porque todo llega, siempre dice. Tener un piano en una familia humilde era un sueño y más aún ser músico, pero desde pequeña, siempre me ha dicho "tú puedes ser lo que tú quieras ser". A veces las canciones se buscan pero esta creo que siempre estuvo ahí esperando. La letra no es mía, es de mi madre. Son sus frases. Sellos lacrados. Ella se ríe cuando le digo que tendremos que compartir los derechos de autor. Hay padres que dejan grandes fortunas. Esta canción es la mía y va dedicada a todas las madres que nos dan alas y cosen nuestras heridas una y otra vez. No importa cuántas veces".